el que sabe... sabe!

y el que no... le cuento!

la segunda mitad del 2007 la viví en el Distrito Federal. allá donde los carros son muchos, los peceros llevan pescados que no tienen auto y descubrir a los cafres en un embotellamiento es un increíble antídoto para los ataque de ira. En esta ciudad, donde la gente es muy amigable, donde la comida tiene alto contenido picoso y el tequila se toma con todo; conocí entre tantaa gente linda con la que me relacione, a 4 personas que nunca mas voy a olvidar. conviví con ellos, cocine (poco, mejor lo hacían los chicos) para ellos, compartí sentimientos hermosos y me acompañaron en los cambios que hoy me definen. mas que en el tiempo, yo creo en la experiencia. los extrañoo, ya quiero verlos!